Hoy he hecho mi primera marcha cicloturista, y para mi estreno he elegido la Larra Larrau, una carrera en bicicleta de carretera de 143 km que sube 3 puertacos en el pirineo navarro: la Piedra de San Martín (1760 m), Isarbe (1450 m) y Larrau (1585 m).
He venido a Isaba con amigos del GMP que ya han hecho varias marchas y dicen que es una de las más duras de las que hay en España, pero como no debo de andar muy bien de la cabeza, pues me he estrenado en la competición ciclista con ella y ¡me ha gustado un montón!
No tenía muy claro cómo iría en carrera y si lo pagaría al final debido a mi falta de experiencia ciclista y al poco tiempo de preparación que he tenido (menos de 2 meses…), así que decidí salir con Luz e intentar ir con ella los 2 primeros puertos para ayudarla en los tramos entre-puertos, ya que quería bajar de 7h30’. Ella ya hecho muchas marchas, así que me servía para controlar mi ritmo y no abusar de mis fuerzas (tenía miedo de no estar en suficientes buenas condiciones musculares…).
De salida, me he encontrado muy bien y he subido la Piedra de San Martín muy cómodo metiendo con las primeras rampas duras el plato pequeño (30 dientes) y jugando con los piñones según el tramo. El tiempo a esas alturas era estupendo, con nubes y claros y una temperatura estupenda.
Al coronar el puerto sin problemas, me he puesto el chubasquero para no pasar frío, pero me ha venido estupendamente porque al poco de empezar la bajada nos hemos metido dentro de una espesísima niebla que nos ha calado hasta los huesos y tras salir de la niebla nos ha acompañado una fina lluvia durante todo el tramo existente hasta el inicio del Isarbe.
Este puerto ha sido extraordinariamente duro: con 11 km de ascensión, 1000 m de desnivel y una constante lluvia que nos ha acompañado casi hasta la cima. Pero me ha gustado mucho (lo poco que se veía por la niebla…). Aquí sí que he metido todo el desarrollo que tenía: un 30 de plato y 26 de piñón y poco a poco y con mucha cadencia para no sobrecargar las piernas he comenzado a llevar un buen ritmo y a pasar a bastante gente. Las rampas eran muy constantes todo el tiempo, con pendientes entre el 9% y el 11%, lo que me ha ido muy bien. Además, he ido haciendo “eses” por la carretera para intentar reducir la pendiente... Tras esperar un poco a Luz en el avituallamiento de la cima, hemos vuelto a bajar con mucho cuidado para buscar el último puerto: el temible Larrau.
A esas alturas llevábamos un tiempo estupendo para bajar la marca propuesta de Luz (y había remitido la lluvia), y yo seguía con muchas energías y más ánimos. El inicio del puerto antes de llegar al pueblo de Larrau ha sido muy duro, con una pendiente media del 12% durante 2 km y aunque me ha costado un poco coger el ritmo (volvía a llevar el 30-26 de inicio), pronto he vuelto a coger buena cadencia y a ir pasando a gente. Este puerto tiene una dureza similar al Isarbe, pero tiene rampas mucho más duras (hasta un 16%) en tramos constantes al 10-12% con la ventaja de tener un descansillo de 2 km a 5 km de coronar el puerto. Poco a poco nos hemos ido metiendo en la niebla y subía como podía volviendo a hacer las “eses”, pero con fuerzas. Aunque la niebla nos calaba a cada metro (la visibilidad era escasísima), tenía la ventaja de que no permitía ver lo que nos quedaba y no desanimarnos….
Tras volver a esperar un poquito a Luz en el avituallamiento del descanso y coronar el puerto ya no teníamos tan claro que llegaríamos en tiempo para hacer la marca de Luz porque nos quedaba la bajada (que se despejó enseguida, volviendo a ver el sol tras la subida de la Piedra de San Martín) y la subida al Alto de Laza, un puerto de unos 5 km sin grandes pendientes. La bajada era muy buena y se podía coger velocidades de 60 km/h al no haber curvas cerradas.
Tras subir Laza, a 10 km de meta, he visto que teníamos tiempo para hacer marca, así que me he puesto a tirar en el falso llano de bajada a 40-50 km/h que quedaba tras la bajada con Luz a rueda para llegar a la meta de nuevo en Isaba en 7h26’53”!!!
¡¡¡SUPERCONTENTOS!!! Un tiempazo, y lo mejor fueron las sensaciones de que no me fallaron las fuerzas en ningún momento. El resto muy bien, tanto los que iban a la carrera corta de 100 km (Loli, Ana y Gabi) como los que iban a la larga (Javi la acabó en 6h21’!!!), tal vez la lluvia fue beneficiosa porque con calor habría sido mortal…
El ciclismo, todo un descubrimiento…
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