Este finde no he tenido ni competición ni salida a la
montaña: me he ido a Montanejos (Castellón) con amigos de las carreras de
orientación a hacer un fin de semana multiaventura, además de hablar de Verd3,
el futuro equipo que se está creando con componentes de equipos varios de la
Comunidad Valenciana. Íbamos a hacer bici de montaña, correr por montaña,
escalada, espeleología y o-birring, así que no íbamos a parar mucho!
La noche del viernes nos fuimos para allá todos los que
íbamos a hacer bici el sábado, y, a pesar del frío (había ola de frío y había
nevado en Teruel a cotas no muy altas) nos juntamos unos cuantos: Héctor E.,
Ana, Toni, Ma, Héctor N., Oscar, Camil, Sergio F., Jaime y yo. Con nosotros
venía Vicent, de Geoxtrem (la empresa de actividades de aventura de Montanejos
que nos ayudó a organizar el I Raid Sierra de Espadán), para hacernos de guía
por la zona.
Yo no iba con mi bici: Jaime me había dejado una suya vieja
y llevaba bastante precaución porque no llevaba demasiados frenos, pero bueno,
aparte de los frenos y de llevar la cadena oxidada iba bastante bien!
De Montanejos salimos por carretera (no había demasiados
caminos para subir…) en dirección a Puebla de Arenoso remontando el río Mijares
y el embalse de Arenoso hasta el cruce de Pina de Montalgrao, donde la subida
se hizo más fuerte. Esta carretera la seguimos hasta el primer collado, donde
tomamos un camino (¡por fín!) hacia la izquierda de bajada, para al poco tomar
una senda algo técnica en dirección a la aldea de Los Calpes. Yo tuve alguna
que otra dificultad por los frenos, mi inseguridad y lo lentos que teníamos que
ir en los sitios más complicados por ser tantos y que siempre había alguien
parado, por lo que no podía coger ni seguridad ni velocidad para pasar
determinados puntos…
Tras hacer una pequeña
pausa en el bar del pueblo, volvimos a coger otro camino en dirección a un
piquillo con unas vistas espectaculares de la zona (en la foto, Montanejos y el
barranco de La Maimona). Tras esa subida, ya sólo teníamos que bajar a
Montanejos por pista y sin dificultad alguna.
Tras una comida rápida, volvimos a quedar con Vicent para
que hiciera de guía por la Cueva Cirat, una cueva de unos 1100 m de longitud. Esta
vez sólo fuimos 5 los que nos apuntamos: Héctor E., Héctor N., Sergio F., Jaime
y yo (el resto se fue a escalar o a correr). Yo nunca había hecho espeleología
y me gustó mucho ver las formaciones que habían: estalactitas, estalagmitas,
columnas, antiestalagmitas, coladas, gours, bóvedas enormes, ... y otras más que nos contaba Vicent,
pero que ya se me han olvidado! L
Otra cosa que me llamó mucho la atención fue lo que parecía ser coral
petrificado que llegaba hasta un cierto nivel, como si fuera esa cueva hubiese
estado a nivel del mar hace millones de años…
Vamos, ¡una experiencia muy
recomendable!
Y por
la noche, ya con David, Sara, Carlos B., Dori e Inma nos tocaba el O-Birring!
(para los que no lo sepan es una carrera de orientación en la que entre balizas
tienes que beber cerveza, memorizar y correr…, vamos para acabar cocío!). Lo
hicimos por equipos, lo más equilibrados posibles, con orientadores más
experimentados con los menos: a mí me tocó con Sergio F. (en cuanto a
orientación éramos los que mejor íbamos! J). Pero aquí entraban en juego otros factores, como
beber rápido y, sobre todo, ¡ver las balizas! ya que teníamos como balizas
cartones blancos y naranjas que aunque estuvieras a 2 metros costaban de ver!
(en la foto de abajo se me ve helado con Camilet, con balizas en la mano).
Al final Sergio F. y yo fuimos los vencedores morales del
O-Birring (el equipo de David y Sara llegaron antes pero con trampas! ;-P ).
Allí mismo, con la ropa de correr y demás cenamos unas pizzas y también
celebramos el cumple de Inma a las 00:00 en punto, con tarta incluida! Vamos
una noche de lo más completa y divertida!
A la mañana siguiente, con poquitas
horas de sueño, madrugamos para la última actividad del finde: unos nos fuimos
a escalar y otros a correr. A escalar fuimos sólo Toni, Ma, Sergio F. y yo, y
estuvimos en la vía Woody Allen (4+), relativamente fácil, ya que sólo encontré un
punto complicadillo, pero porque me salí un poco de la vía, y tuve que
bordearlo.
Sólo
pudimos hacer una vía porque teníamos cita en el Spa a las doce de la mañana
incluido en el precio del alojamiento, y claro, después del finde de no parar,
pues no podíamos renunciar a él! Así que allí estábamos puntuales (para otras
cosas no lo habíamos sido tanto!) para relajarnos entre la piscinita y el
jacuzzi!
A comer se unieron Sergio A. y Mila, y ya por la tarde
sólo teníamos la reunión de Verd3, cargar trastos y para casa!
Un finde estupendo, con
amigos, deportes y risas ¡para repetir!